La protección jurídica de las marcas rurales y artesanales mexicanas

mayo 2, 2025

De las manos del campo al mercado global: proteger lo nuestro

En México, la riqueza artesanal y productiva rural es enorme: textiles, mezcal, café, miel, cerámica, bordados, entre muchos otros productos. Sin embargo, muchos productores no registran sus marcas, lo que los deja vulnerables a plagios, apropiaciones indebidas o pérdida de valor comercial. Registrar y proteger legalmente una marca rural o artesanal no solo es posible, es vital para garantizar justicia económica y cultural.

¿Qué es una marca en términos legales?

Una marca es cualquier signo que distingue productos o servicios de otros similares en el mercado. Puede ser una palabra, imagen, sonido o combinación de ellos. Registrar una marca otorga a su titular el derecho exclusivo de usarla y defenderla ante terceros.

¿Por qué proteger marcas rurales y artesanales?

1. Defensa contra el plagio

Muchos diseños indígenas y nombres de productos tradicionales han sido registrados por terceros ajenos a las comunidades. Un registro de marca permite frenar esos abusos legalmente.

2. Mejora del valor comercial

Un producto con marca registrada genera mayor confianza en compradores nacionales e internacionales, lo que se traduce en mejores precios y reconocimiento.

3. Acceso a apoyos y financiamientos

Muchas convocatorias públicas y privadas para exportación, ferias o créditos requieren que el producto esté protegido legalmente.

¿Quién puede registrar una marca artesanal o rural?

  • Productores individuales.
  • Cooperativas o grupos comunitarios.
  • Asociaciones civiles.
  • Representantes legales de comunidades indígenas o rurales.

¿Qué se necesita para registrar una marca?

  • Identificar el nombre o logo que distingue el producto.
  • Consultar que no exista una marca igual o muy similar (búsqueda en el IMPI).
  • Presentar solicitud ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI).
  • Pagar derechos de registro (existen descuentos para pequeños productores y comunidades indígenas).

Tipos de protección adicionales

Denominaciones de origen

Protegen productos cuya calidad o características dependen del lugar donde se producen, como el Tequila, el Mezcal, la Talavera o el Café de Veracruz.

Indicaciones geográficas

Certifican productos de ciertas zonas sin necesidad de que todos sigan el mismo proceso estricto de denominación de origen.

Ejemplo real:

La comunidad de San Juan Colorado, Oaxaca, registró su marca colectiva de textiles tradicionales. Esto les permitió detener la venta de copias industriales de sus bordados y posicionar sus prendas en mercados justos internacionales.

¿Qué pasa si no se registra?

Si un tercero registra primero el nombre o el diseño, el productor original puede perder derechos de uso, o verse obligado a litigar durante años para recuperar lo que era suyo.

Consejos prácticos para productores rurales

  • No esperes a ser famoso para registrar tu marca.
  • Consulta asesores legales o instituciones como el IMPI.
  • Usa siempre la misma marca en etiquetas, empaques y redes sociales.
  • Organízate en cooperativa si los costos individuales son altos.

Proteger la tradición es proteger el futuro

La herencia cultural de México no debe ser usada sin respeto ni beneficio para sus verdaderos creadores. Registrar marcas rurales y artesanales no es solo un trámite burocrático: es un acto de defensa cultural, económica y de dignidad. Porque cada hilo, cada sorbo, cada grano producido en el campo merece reconocimiento… y protección.